Rompé. Quemá. Que duela. Sí… así como leés. Es necesario morir para renacer. Cambiar la piel y eso en el mundo humano duele, incomoda, molesta. Por eso la mayoría de las personas viven en automático como adormecidas. En la famosa zona de confort que nos matiene como zombies.

Despertá, respirá profundo, animate a deconstruirte. A hacerte preguntas. A conocerte. A SER. Rompé, quemá, que duela, pero RENACÉ.

MORÍ a lo viejo, a lo que no es tuyo, o si, para elegir. Volá, sé valiente, animate a la magia de despertar a la conciencia, al contenedor del TODO. Mindfulness es clave. Practicá la atención aquí y ahora. Respirá en silencio y quietud. Desarrollá la valentía en cada inhalación.

Te prometo que no pasa nada… o si, perdón… pasa TODO.

En ese radio la vida comienza a SER «imperfectamente» MÁGICA.

ANIMATE… LANZATE… ROMPÉ… VOLÁ?❤

Por Marcela D’Ambrosio, directora de Capital Humano de #sabelatierra y creadora de @liveworkjoy