Dicho nombre surgió por la pasión de ellos por todo lo natural y la necesidad de volcarse cada vez más a lo natural en todos los sentidos de la vida.
“El amor que teníamos por la apicultura nos llevó al deseo de llevar a cada hogar productos que son completamente naturales y que hacen bien”, nos cuenta Jorge. Por esta razón le dieron vida a Tiempos Naturales.
Comercializan todos los productos que las abejas realizan en su colmena y la gran mayoría de sus derivados: miel, jalea real, propóleos, polen natural, cera virgen, panales, polivitamínicos (mezcla de miel, polen y propóleo), caramelos de miel y propóleo, aderezos a base de miel y mostaza, velas aromáticas de pura cera de abeja (sin parafina), y granolas con miel.
Además cuentan con un gran sector de bebidas de la colmena como hidromiel, cerveza artesanal Honey, licores con miel y vinagre de miel. Y no menos importante es el grupo de cosmética apícola: cremas faciales y curativas con productos de la colmena, crema de apitoxina (producida con la extracción del veneno de abejas ideal para el reuma y dolores en general), jabones de glicerina y exfoliantes, cera depilatoria, shampoo y crema enjuague con miel y propóleo, balsamos labiales y cremas hidratantes.
“Nuestro sueño y deseo es que cada persona que nos visita pueda conocer un poquito más sobre lo que hacemos y sobre lo que hacen las abejas por nosotros”, describe Jorge. Y agrega: “Ser parte de Sabe la Tierra nos está significando la apertura a nuevas posibilidades y oportunidades, a que nos conozcan en el lugar indicado, ya que la idea que pregona Sabe la Tierra es la misma que la nuestra, vivir de una manera diferente y mejor. Una gran oportunidad para conocer personas que piensan similar a uno y una maravillosa ocasión para hacer crecer nuestro emprendimiento y seguir aportando desde nuestro humilde rincón a una vida más sustentable y natural para todos”.
Su mayor desafío es concientizar a los consumidores y los que aún no lo son, sobre la importancia de cuidar y de salvar a las abejas, “ya que si no lo hacemos no le estamos dejando nada de qué disfrutar a nuestros hijos y nietos”, confiesa Jorge. Y concluye: “A los que no se animan a emprender les diría que se animen, que todo se puede. que le pongan pasión en lo que están haciendo, ya que ese va a ser el motor que va a empujar sus ideas y sus logros”.
Vení a conocerlos y a saborear sus productos!