En la escuela secundaria, un grupo de compañeras soñaba con un proyecto en común para hacer al finalizar el colegio. En ese mismo momento surgió la idea de hacer mermeladas caseras.

Luego, con el pasar de los años, cada una siguió su vida, pero a Viviana D’Auria le quedó siempre esas ganas de darle vida a esa vieja idea de hacer mermeladas.

Como ya tenía experiencia haciendo escaveches y licores gracias a sus abuelas, quienes también hacían mermeladas, Viviana comenzó a cocinar para uso personal y familiar. Y así nació el viejo proyecto de amigas y se convirtió en realidad: Merlicó, que significa Mermeladas, Licores y Conservas.

A sabiendas de la existencia de Sabe la Tierra, Viviana se animó a darle un toque más profesional a su emprendimiento personal y comenzó a cocinar para poder vivir de eso. Llegó como consumidora, y desde hace más de un año integra nuestra comunidad de productores.

“Estoy muy contenta de formar parte de Sabe la Tierra, hago lo que realmente me gusta y recibo el agradecimiento directo del consumidor, que vuelve en búsqueda de nuestras creaciones«, concluye.